jueves, 28 de noviembre de 2013

La Historia distorsionada de Giancarlo Ibargüen

En Nuestro Diario del dia de hoy, el ex-rector de la UFM demuestra una vez mas (ya lo habiamos visto con Carlos Sabino y su "Historia Silenciada") que en esa Universidad la historia no necesariamente es la ciencia que se estudia con mayor rigurosidad. El señor Ibargüen indica en el artículo que, a propósito del Dia de Gracias, los primeros colonos pasaron hambre y pobreza debido a esquemas colectivistas de cultivo; ahora bien, si un va a una tierra extraña y lejana,con apenas recursos, es de esperar que en algún momento inicial las personas se organicen colectivamente para defenderse y cultivar juntos (los kibbutz son un buen ejemplo reciente) ya que a) no conocen el territorio b) no existe la capacidad física para cultivar una extensión de tierra por sí solo c) una sola persona (o núcleo familiar) no puede cubrir totalmente sus necesidades de defensa y abrigo. El problema de Ibargüen es que extrapola sus prejuicios a fases históricas donde no había otra salida con tal de demostrar que el individualimo (como base del capitalismo) es la mejor opción siempre, en toda época y lugar. Su poco nivel de análisis me recuerda el "happening" de Luis Figueroa en la muestra de la pintura Gloriosa Victoria en el Palacio Nacional: su playera de "capitalismo" a un lado del retrato de Arévalo... simplemente no entienden.

Regresando a los colonos en  Norteamerica, la National Geografic hace algunos años publicó  un reportaje de Jamestown, entre los años 1607 a 1620, donde mencionan que la mala elección en el material humano y el desconocimiento de tecnica agrícola influyeron en los malos resultados de las cosechas. Resultado: hambruna. A no ser que la NatGeo sea de izquierda, su estudio es bastante esclarecedor de cómo funcionó la colonia en sus principios y no cómo se lo imagina el ex-rector.

Por otra parte, en el artículo de Ibargüen que la Revolución Industrial influyó para que la esperanza de vida mejorara, de 35 años a 70, así como la mortalidad infantil, de 200 a 7 actualmente. Pues bien, desde mi punto de vista, lo que mejoró la esperanza de vida fue la irrupción de la salud pública en los siglos XVIII y XIX, ya que a los industriales les importaba un bledo los hijos de los trabajadors y los trabajadores mismos. Si no, vean cómo los trabajadores tuvieron que luchar por la disminución de la jornada laboral...

En conclusión, considero que muchos en la UFM manejan la Historia a su convenciencia para impulsar una interpretación de la,misma para lavarle la cara al sistema.

Desafortunadamente, su "Historia Silenciada" no cuaja en ninguna parte, sólo en su Colegio Mayor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario